Finca de Artikutza: Eskas - Canal de Berdabio - Presa de Ugalde - Artikutza - Cascada Erroiarri - Eskas
La finca de Artikutza se sitúa en territorio Navarro, en la localidad de Goizueta, sin embargo, pertenece al ayuntamiento de San Sebastian. Es el lugar más lluvios de la Península Ibérica; para hacernos una idea de sus cifras, alcanzan la suma de lo llovido en Bilbao y Donosti. Se compone casi en su totalidad de bosque, pero atravesando este frondoso paraje llegamos al poblado de Artikutza, con no menos encanto.
Artikutza no ha sido siempre tan bella como hoy la conocemos. En el siglo XIII, era propiedad de la Colegiata de Santa María de Roncesvalles que explotaba directamente o arrendaba ferrerías, derechos de producción de carbón, extracción de mineral, aprovechamiento forestal y de pastos para el ganado, siendo visibles aún, los mojones con el símbolo de Roncesvalles en los edificio o limites de Artikutza, entonces llamado Anizlarrea.
A comienzos del siglo XIX los diferentes gobiernos liberales impulsaron un proceso desamortizador de los bienes de la iglesia y las órdenes religiosas. Desde entonces la finca va cambiando de propietarios quienes explotan los terrenos y se contruye un ferrocarril minero.
En el siglo XX, crece la población de San Sebastián, esto, unido a ser residencia veraniega de los Reyes de España, hace que la ciudad necesite un mayor abastecimiento de agua para sus residentes y visitantes. Los manantiales de Artikutza alimentaban las aguas que luego surtían la capital guipuzcoana. En enero de 1919 el ayuntamiento de San Sebastián compra por 3.200.000 pts la finca de Artikutza. La adquisición por parte del ayuntamiento donostiarra, convirtió Artikuza en el Edén boscoso que conocemos actualmente, gracias a que se prohibió el ganado, la pesca y la caza. También se restringió el acceso a la finca.
Se hizo una gran reforestación para paliar la degradación de los bosques provocada por la minería y la explotación maderera. La conservación de los bosques servía para mantener el agua en óptimas condiciones de pureza. La presa de Artikutza se construye entre 1950 y 1960, embalsando las aguas del río Enobieta
El ayuntamiento de Donostia preserva este espacio como si de un tesoro se tratara (aunque para mi lo es. literalmente) prohibiendo en su interior la caza, la pesca, el acceso del ganado, la recogida de troncos caídos, el acceso en coche sin permiso...
Como llegar
La ruta de hoy
El acceso al poblado de Artikutza en coche requiere permiso del ayuntamiento, como ya he dicho. Sin embargo, esta ruta comienza en los limites de la finca de Artikutza, más concretamente en la casa del guarda de Eskas, por lo que no necesitaremos permiso para adentrarnos, a pie, en las entrañas de este maravilloso lugar.
Existen distintas rutas por el poblado aunque solo dos de ellas están balizadas. La idea es tenerlas todas documentadas en este blog bajo la etiqueta Artikutza, pero dadme tiempo. Esta ruta de hoy, comparte un trozo no balizado con otro balizado, por lo que recomiendo realizar la ruta con GPS ya que hay tramos no señalizados donde se puede perder uno. (¿Como usar el móvil como GPS?) haz click aquí.
Desde Eskas, la ruta comienza un serpenteante descenso entrecortado por las pequeñas regatas que atraviesan el camino y riegan los alerces que vamos bordeamos hasta alcanzar la ermita de Berdabio. En este punto, abandonamos la tierra y continuamos, a contracorriente, sobre la piedra musgosa que sujeta las aguas del canal hasta llegar a la presa de Ugalde. Aquí termina el camino del canal y continuamos siguiendo el río, pero por un ancho sendero que nos recoge y nos guía hasta el poblado de Artikutza. Al salir del poblado, paramos un momento en el embalse de Enobieta para después comenzar la subida de retorno al punto de origen. Atravesamos la cascada de Erroiarri y después, atravesamos un impresionante hayedo tras el cual, ascendemos hasta la carretera que nos devuelve al punto de origen, finiquitando la preciosa circular de hoy.
Como llegar
En coche
Ruta
Tiempo sin paradas: 4 horas.
Cumbres: -
Desde San Sebastian (18km - 30min): Tomamos la GI-2132 hasta llegar al municipio de Oiartzun. Aquí tomamos GI-3631 dirección Artikutza y tras pasar el campo de fútbol y el barrio de Altzibar (Km 2), comienza la serpenteante carretera de ascenso que nos conducira hasta Eskas (638m), una vez pasado el Alto de Bianditz.
Ruta
Tiempo sin paradas: 4 horas.
Cumbres: -
Artikutza: Eskas - Canal de Berdabio - Presa de Ugalde - Artikutza - Cascada Erroiarri - Eskas 14,88 km
Autor: paisenmimochila
¿Como seguir el track GPS?
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La salida la organizamos "prontito" y nos encantó encontrarnos con este panorama en la carretera, en el Alto de Bianditz.
Aparcamos el coche en la entrada de la finca de Artikutza, en la casa del Guarda de Eskas y tomamos el camino que se abre detrás del parking.
Luna llena sobre Donosti |
Aparcamos el coche en la entrada de la finca de Artikutza, en la casa del Guarda de Eskas y tomamos el camino que se abre detrás del parking.
Comenzamos el itinerario descendiendo por una pista herbosa que serpentea alrededor de unos alerces japoneses.
Por el camino, se nos cruzan diversas regatas y, más adelante, el sendero se interna en la frondosidad para pasar cerca de un refugio en ruinas.
Ruinas |
El camino nos conduce hasta la ermita de Berdabio, momento en el que abandonamos la tierra para caminar por la musgosa roca que sujeta las aguas del canal. (45min)
El camino del canal es cómodo. No presenta apenas tramos estrechos y casi siempre se abre un pequeño sendero de tierra, paralelo al canal, donde es más fácil caminar. El único problema es mantener un ritmo constante, sin pararnos a buscar una buena foto en las regatas que caen por la izquierda del canal.
A nuestra izquierda las aguas del canal, y a nuestra derecha las aguas del río Añarbe que, gracias a su alto potencial bológico-ecológico en su cauce alto, ha sido declarado 1 de las 82 reservas naturales fluviales de España. En algunos tramos, el terreno nos deja descender hasta acercarnos hasta el mismo para admirar, de cerca, su potente descenso que ha pulido con el paso del tiempo las grandes rocas que limitan su cauce.
Tras un par de kilómetros, llegamos a la Presa de Ugalde (1h30min) donde damos por finalizada nuestra incursión por el canal.
Nuestra derecha sigue siendo el río Añarbe pero a nuestra izquierda toman el relevo del canal las hayas y el verde musgo que lo envuelve todo, como una coraza que quisiera proteger estos tesoros de la naturaleza.
Llegamos a un pequeño puente que cruza el río Añarbe. Sobre sus dos riberas, encontramos senderos que nos llevan hasta el poblado. Nosotros optamos por no cruzar el puente ya que, en esta lado el camino es más natural, a diferencia de la pista de cemento que se forma al otro lado del río, paralelo a nosotros. (2 horas)
El sendero nos lleva hasta el poblado de Artikutza, un pequeño núcleo de encantadoras viviendas a las que se suman una iglesia y una pequeña taberna "Ostatu Zahar".
Artikutza |
Ostatu Zahar |
La ruta continúa y nos interna en el corazón de Artikutza. Llegamos a mi lugar preferido de Artikutza. (2h 45min) Se trata de un bosque de hermosas hayas, erguidas y caídas sobre el colchón formado por sus propias hojas; el río, brotando suave, rodeando sus gruesas raíces y nutriendo al verde musgo que colorea roca y madera. Este punto es Artikutza; naturaleza en su estado puro, naturaleza viva y naturaleza muerta que, a su vez, otorga vida.
Desde este bosque retomamos el ascenso, también por zonas increíbles, hasta dar con la carretera que nos devuelve de nuevo al punto de inicio de la ruta, finalizando de esta manera la maravillosa ruta de hoy.
Un país en mi mochila
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